Nos encontramos en un contexto muy particular que cambio nuestras rutinas por completo. Una pandemia trascendió las fronteras y se encargó de hacer estragos en países de todos los rincones del mundo, llevándonos no solo al miedo y la incertidumbre, sino a una gran cantidad de modificaciones en nuestro día a día.
Este virus del que todos hemos escuchado hablar (probablemente varias veces por día) tiene una particularidad que nos llevó hasta estas circunstancias: es extremadamente contagioso. No planeamos, en este artículo, adentrarnos en detalles científicos que no manejamos con el conocimiento que corresponde, sino que buscamos hablar de la situación en la que nos encontramos más allá de dichos detalles.
El virus, siendo tan contagioso, llevó a varios países a tomar medidas relacionadas con evitar el contacto, buscando evitar que la situación se torne más grave. El aislamiento social, la cuarentena y todas las medidas de este estilo, conllevan un gran cambio a nivel social, ya que quedarse en casa sin ninguna posibilidad de salir o ver a otras personas no es algo a lo que estemos acostumbrados.
Además de esto (que puede resultar obvio) esta situación implica un gran impacto a nivel económico: si bien existen personas que pueden trabajar desde su casa, también están quienes trabajan de manera informal y dependen del ingreso que puedan generar en el día al día. Teniendo en cuenta todos estos factores es preciso decir que la situación es, al menos para empezar a describirla, muy difícil de manejar.
Pero ¿De qué manera puede relacionarse esto con la industria del eCommerce?
En este momento muchos negocios se encuentran buscando una manera de mantenerse en pie ante las circunstancias. Las tiendas ubicadas en locales deben cerrar sus puertas para cumplir con las medidas que se están implementando. Por esta razón, el eCommerce se encontró con un éxito circunstancial que deriva de las facilidades que puede ofrecer a los dueños de los negocios en este momento.
Las tiendas virtuales permiten continuar el contacto con el cliente con todos los servicios que este implican: desde la presentación de los productos hasta los envíos de los mismos según las medidas de seguridad que requiere este contexto. De esta manera, aquellas personas que se encuentran ante la pregunta sobre la manera de mantener un negocio en funcionamiento sin poder atender al cliente de manera directa, contarán con una gran respuesta a considerar.
Aprovechamos esta oportunidad para solicitar que por favor tomes los cuidados necesarios para no ponerte en riesgo y ayudar a que la situación mejore. Pronto saldremos adelante.